Las emisiones de residuos plásticos son un problema de gran importancia mundial.
La fabricación de productos químicos y plásticos representa alrededor del 7% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, y la extracción de petróleo para fabricar plásticos representa hasta el 8% del consumo mundial de petróleo.
Además, casi la mitad de todo el plástico producido solo se usa una vez antes de desecharse y solo el 9% se recicla. El resto obstruye nuestros lagos, vertederos y océanos, o produce una contaminación nociva si se incinera.
Este sistema, en el que continuamente se fabrica y desecha plástico nuevo, es insostenible. Es por eso que en la semana Net Zero Week (del 1 al 7 de julio), Schoeller Allibert se compromete a hacer todo lo posible para ayudar a reducir las emisiones del plástico.
Nuestro embalaje reutilizable de plástico está diseñado para ser demasiado bueno para desecharlo. Esto significa principalmente que, en lugar de tirarlo después de cada uso, el embalaje reutilizable de Schoeller Allibert está diseñado para utilizarlo una y otra vez, hasta un promedio de 250 veces. Con cada reutilización, se evita añadir plástico nuevo a la cadena de suministro, lo que significa que, a largo plazo, este modelo ayuda a prevenir el residuo plástico.
Los estudios muestran que el embalaje reutilizable tiene un potencial de prevención de residuos de aproximadamente 4:1. Como resultado, cada tonelada de embalaje reutilizable que se utiliza en logística consigue eliminar de la circulación cuatro toneladas de residuos. En comparación con otros materiales comúnmente utilizados para envases de un solo uso, como la madera o el cartón, las cajas de plástico reutilizables producen un 5% y un 88% menos de emisiones durante su vida útil, respectivamente.
El concepto de "jerarquía de residuos" se ha utilizado durante casi 50 años. Este modelo evalúa los mejores métodos para la reducción y la manipulación de residuos, al mismo tiempo que prioriza la conservación de los recursos. La prevención y la reducción de residuos se sitúan en la cúspide de la pirámide, seguida de la reutilización, porque reutilizar materiales significa mantenerlos en servicio el mayor tiempo posible antes de reciclarlos, reduciendo el consumo de energía y recursos.
La reutilización es generalmente preferible al reciclaje porque los programas de reciclaje dependen de que los sistemas de recogida estén en su lugar y se usen fácilmente. Sin embargo, desafortunadamente, este no es siempre el caso, ya que solo el 49% de los envases de plástico utilizados en Gran Bretaña se reciclan, según la Federación Británica de Plásticos. Todos los materiales que se recogen deben transportarse a plantas de reciclaje, donde se utilizan energía y agua en el proceso de reconversión en nuevos productos.
Por el contrario, el embalaje reutilizable de Schoeller Allibert permanece en uso entre cinco y 15 años antes de que sea necesario volver a procesarlo, lo que lo convierte en un uso mucho más eficiente de los recursos naturales.
El reciclaje sigue siendo esencial para proporcionar una fuente sostenible de materias primas a las industrias que dependen del plástico para la producción. Las investigaciones indican que reciclar plásticos ahorra entre un 30% y un 80% de las emisiones de carbono generadas por el uso de materiales vírgenes, y si todo el plástico se reciclara, podríamos ahorrar entre 30 y 150 millones de toneladas de CO2 cada año.
Todos los envases y embalajes de Schoeller Allibert están diseñados para ser totalmente reciclables y contienen al menos un 30% de plástico reciclado, y esta cifra suele ser mayor, especialmente en nuestra gama Circuline. Además, nuestro objetivo es facilitar al máximo a nuestros clientes el reciclaje de sus embalajes de plástico, desde ayudarlos a realizar un seguimiento de los activos con SmartLink para garantizar que las cajas viejas se puedan encontrar y reutilizar, hasta nuestro programa de recompra, que garantiza que los envases se recuperen para su reciclaje al final de su vida útil. Estamos comprometidos a simplificar el proceso de reciclaje siempre que podamos. Varias de nuestras fábricas contienen molinos que pueden triturar las cajas de plástico viejas para fabricar directamente nuevos embalajes reutilizables.
Sin embargo, sabemos que podemos hacer más. Es por eso que para 2035, reduciremos nuestras emisiones de alcance 1, 2 y 3 en un 30% en comparación con nuestra línea de base de 2020, y para 2050, cerraremos completamente el ciclo del plástico volviéndonos completamente circulares.
La semana Net Zero Week 2023 destaca uno de los problemas más importantes que afrontan las empresas modernas. Esperamos que nuestra ambiciosa acción sobre los residuos plásticos inspire y anime a otros a intensificar sus operaciones y nos ayude a avanzar juntos hacia un futuro más sostenible.